viernes, 27 de julio de 2012

ENTRE LA TIERRA Y EL CIELO.

Que la lluvia y el viento se lleven consigo la memoria.


Que de los hechos de las personas ningún escrito quede.


Que la tierra se abra y que de los infiernos asciendan todas sus llamas.


Que llueva fuego hasta que la brizna más pequeña de hierba sea ceniza.


Que el mar ahogue todo aquel que vive del aire.


Que los campos se tornen de frio mármol.


Que nada vuelva a ser como ha existido hasta ahora.


Que nadie me conozca.


Que mi nombre sea olvidado en esta tierra.


Que mueran los dioses.


Que su fuerza es funda con la nada.


Que el sol y las estrellas se olviden de nosotros.


Que hable la negra profundidad del firmamento.


Y que la Tierra en donde vivimos resucite de sus cenizas...